Es probable que en alguna ocasión a lo largo de tu vida hayas sufrido una alteración en el ciclo menstrual. Cuando esto ocurre, solemos buscar un ‘culpable’ de este acontecimiento, pues solemos normalizar la llegada de la regla siempre en el mismo momento… Y cuando no ocurre, nos genera preocupación, incertidumbre y dudas. Entre los agentes señalados se encuentran las relaciones sexuales.
Pero nada más lejos de la realidad. El sexo no retrasa directamente la menstruación. Durante la actividad sexual aumentan de manera exponencial los niveles de oxitocina y endorfinas, hormonas asociadas al placer. Sin embargo, las relaciones sexuales no afectan a las hormonas reproductivas que rigen el ciclo menstrual. Por ello, si alguna vez has asociado la práctica sexual como culpable del cambio en el ciclo menstrual, no estás en lo cierto. Es un mito lejos de la realidad.
¿Qué causan cambios en los ciclos menstruales?
Después de aclarar que no existe relación directa entre sexo y cambios menstruales, veamos a continuación cuáles son los motivos que pueden provocar alteraciones.
Estrés
El estrés, según la Organización Mundial de la Salud, es un conjunto de reacciones fisiológicas que preparan al organismo para la acción ante una situación que se percibe como una amenaza o que demanda un incremento de atención. Esto provoca que el cuerpo libere cortisol, pudiendo alterar así el equilibrio de hormonas reproductivas como son el estrógeno y la progesterona.
También se puede asociar el estrés al sexo con preocupaciones sobre el rendimiento o la imagen corporal. Esto puede provocar indirectamente un retraso menstrual.
Cambios constantes de horarios
Tu reloj interno se ve alterado cuando existen grandes cambios en tu rutina. Por ejemplo, turnos de trabajos rotativos entre día y noche. Esto puede afectar a los niveles hormonales y, en consecuencia, a que tu periodo se adelante o se retrase unos días.
Estilo de vida
Tu estilo de vida determina, entre otras cosas, tus niveles de estrógenos y tu desarrollo hormonal. Por ello, si tu alimentación no es buena o si no practicas actividad física, es probable encontrar alteraciones en tu ciclo menstrual.
Afecciones médicas
Determinadas afecciones o enfermedades pueden alterar la llegada normal de la menstruación. La anorexia nerviosa o el síndrome de ovario poliquístico (SOP) son dos ejemplos que podrían resultar en cambios drásticos en el ciclo. También destacan otras enfermedades o trastornos como la diabetes descontrolada, tumores de ovario, nefropatía, infecciones cerebrales…
Curiosidades y evidencias científicas
Desde hace muchos años y décadas se realizan estudios científicos para comprender aspectos como los cambios hormonales, cómo funciona el ciclo menstrual o qué condicionantes provocan una alteración en el ciclo menstrual.
Según un estudio del Human Reproduction Open (Oxford Academic, 2022), concluye que los ciclos con al menos una relación sexual durante el ciclo presentaron una fase lútea más larga, menos manchado premenstrual y un mayor flujo cervical estrogénico. Esto indica una mayor probabilidad para fecundar con éxito.
Otro de los estudios científicos relevantes que desmontan muchas teorías es sobre la relación entre deseo sexual y ciclo menstrual. Afirman que en la mayoría de mujeres y en general, no existe cambios en el deseo sexual a lo largo del ciclo. Puede ocurrir de manera individual y excepcional, pero en la mayoría de los casos no guarda relación.
No obstante, diferentes investigaciones afirman que mantener sexo durante la menstruación o días previos provocan una disminución de calambres menstruales, además de mejorar el bienestar emocional.